ACTUALIDADES DE LA PANDEMIA DEL COVID-19 POR EL PROF. DR. XAVIER BIGARD (Director Médico de UCI)

La actual pandemia mundial de Covid-19 está generando ansiedad e incertidumbre para las personas en todas partes y, en última instancia, nos llevará a reflexionar sobre la forma en que se organizan nuestras sociedades.

Es increíble que un microorganismo tan pequeño como un virus (el nuevo coronavirus mide 120-150 nanómetros de diámetro, un nanómetro es igual a una billonésima parte de un metro) pueda presentar una amenaza global, en términos de salud, económicos y sociales.

La pandemia hoy

Esta enfermedad infecciosa ahora está afectando a todos los continentes, lo que lleva a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declararla una pandemia, con infecciones globales que se acercan rápidamente a la marca de los dos millones. Como lo han demostrado casi cuatro meses de evaluaciones clínicas, la enfermedad afecta a las personas de maneras muy diferentes, según su edad y la existencia de problemas de salud subyacentes. Se estima que el 80 por ciento de los pacientes desarrollan solo síntomas leves, mientras que el 20 por ciento restante requiere tratamiento hospitalario.

Los adultos jóvenes (entre las edades de 18 y 40) no se han visto relativamente afectados por el virus y en su mayoría solo han mostrado síntomas leves. Sin embargo, si bien es cierto en gran medida decir que los atletas se han salvado, todavía existe el riesgo de que desarrollen la enfermedad. Deben seguir las medidas de protección al pie de la letra y al mismo tiempo proteger a las personas que los rodean. Aunque pueden ser asintomáticos, los adultos jóvenes aún pueden transmitir el virus y transmitirlo a otros.

La enfermedad es altamente contagiosa. Durante mucho tiempo se creyó que una persona con la enfermedad podía infectar a dos o tres personas en promedio. Sin embargo, según los datos más recientes, esa cifra podría ser tan alta como cinco o seis, por lo que es dos veces más contagiosa de lo que se pensaba anteriormente. Esta es solo una de las razones por las cuales las medidas de confinamiento y / o distanciamiento social siguen siendo vitales para romper la cadena de transmisión en la mayoría de los países, incluso (y quizás, sobre todo) entre los jóvenes.

La propagación de la pandemia ha estado lejos de ser uniforme, y los países vecinos muestran tasas de infección marcadamente diferentes. Estas variaciones pueden deberse a diferencias en las estrategias de detección de pacientes y contactos (y en la forma en que se declaran oficialmente los casos), las condiciones de vida, los estilos de vida, los sistemas de salud pública y los factores de riesgo en los grupos de población, que también difieren en términos de factores socioeconómicos. Estas variaciones significativas también se pueden encontrar dentro de los países, lo que dificulta la implementación de medidas diseñadas para proteger a la población mundial.

Confinamiento y distanciamiento social

En ausencia de tratamientos efectivos y una vacuna, los gobiernos se han visto obligados a adoptar medidas de confinamiento y / o distanciamiento social. Además de las dificultades económicas que implican, estas medidas traen consigo una serie de otros problemas con los que las personas deben lidiar: aislamiento social, aumento de la desigualdad, preocupaciones de salud mental, ansiedad general y preocupaciones sobre lo que puede deparar el futuro.

Los corredores también enfrentan grandes problemas cuando se trata de mantener sus altos niveles de condición física, y su capacidad de hacerlo se ve muy afectada por la severidad de las medidas impuestas por las autoridades donde viven. Mientras que algunos tienen que lidiar con el bloqueo completo, otros solo tienen un confinamiento parcial o distanciamiento social con el que lidiar.

La vida después de la pandemia

Es prácticamente imposible decir actualmente cómo saldremos de la pandemia. Aunque está lejos de terminar, algunos países ya han comenzado a flexibilizar sus medidas de confinamiento y paralelamente introducir medidas más estrictas de distanciamiento social, lo cual es una señal alentadora para el futuro. Sin embargo, esto no quiere decir que las cosas volverán rápidamente a la normalidad. Todavía estamos a muchas semanas de recomenzar con los eventos públicos y competiciones de ciclismo. Mientras tanto, los ciclistas deberán comenzar a entrenar al aire libre nuevamente y se necesitará un plan para controlar los riesgos de salud relacionados con el virus.

La UCI publicará en breve el contenido de dicho plan y nuestra entidad realizará la adaptación para nuestro país.

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