Vincenzo Nibali (Astana) ganó la 19° etapa del Tour de France, 138 kilómetros entre St-Jean-de-Maurienne y La Toussuire – Les Sybelles en los que hizo bueno un valiente ataque a 60 kilómetros de meta para arribar en solitario. Chris Froome sigue líder, pero Nairo Quintana le recortó medio minuto y sueña.

La jornada arrancó con todo en el primer puerto, donde además de los intentos por conformar la escapada, hubo acción entre los jefes de fila. Contador atacó un par de veces, siempre con Valverde a rueda y Nibali intentando sus tácticas.

Así coronaron y se reagruparon en el descenso, donde sí lograron abrir hueco Bardet y Urán. Neutralizado el dúo, volvió la calma al lote y un nuevo y numeroso corte de 22 hombres de marchó.

Tanel Kangert (Astana), Romain Bardet (AG2R-La Mondiale), Roman Kreuziger, Michael Rogers (Tinkoff-Saxo), José Herrada, Malori (Movistar), Tony Gallopin, Tim Wellens (Lotto-Soudal), Joaquim Rodríguez, Alberto Losada (Katusha), Rigoberto Urán (Etixx), Pierre Rolland, Cyril Gautier, Romain Sicard (Europcar), Steven Kruijswijk (LottoNL-Jumbo), Ruben Plaza (Lampre-Merida), Dylan van Baarle (Cannondale-Garmin), Nicolas Edet (Cofidis), Stef Clement, Jarlinson Pantano (IAM), Daniel Teklehaimanot y Stephen Cummings (MTN-Qhubeka) fueron los valientes, que llegaron a contar con unos tres minutos de ventaja sobre el mayoritario.

Ya en la Croix de Fer, mientras la fuga se desgranaba adelante y Rolland se iba solo, Astana empezaba su trabajo de selección detrás. A 5000 metros de la cima atacó Valverde pero Sky lo trajo de regreso, aprovechado también el viento frontal.

Las alarmas saltaron más poco después, cuando la cadena se le salió a Froome. Dicho percance fue aprovechado por Nibali para lanzar su ofensiva, que no fue secundada por el resto de los gallos.

Rolland coronó la cima, seguido por Nibali, quien abrió un hueco interesante respecto a los jefes de fila y alcanzó al galo, que lo esperó en el Col du Mollard para hacer causa común. En el cierre de dicha trepada, Bardet decidió volver a la carga y enseñó, de nuevo, sus cualidades para bajar, quedando intercalado entre los dos punteros y los líderes. Desafortunadamente para él, se rompió su bicicleta y fue absorbido por los perseguidores.

Nibali dejó tirado a Rolland en la Toussuire y se encaminó a un buen paso hacia arriba, en tanto que los favoritos viajaban juntos a paso cansino. Finalmente, dentro de los último 6 kilómetros, Quintana lanzó su ofensiva sin mirar atrás.

Froome respondió sentado y a su ritmo, mientras que todos los demás flaqueaban. Con Nibali encaminado hacia la victoria, Quintana siguió apretando y abrió una brecha de algunos segundos sobre el maillot jaune, que decidió medir sus esfuerzos y ascendió limitando daños.

Así, Nibali se alzó con la fracción y subió al 4° lugar en la general (a 6:44), que sigue siendo dominada por Froome con Quintana 2° a 2:38 y Valverde 3° a 5:25.

Para el líder de Astana se trata de su 2° festejo en 2015 tras el campeonato nacional y de la quinta diana en su historial en la Grande Boucle.

Por su parte, Quintana cumplió con nuestras presunciones previas a la montaña y recortó una treintena de segundos.

Mañana se disputará el 20° parcial, 110.5 kilómetros entre Modane y Alpe d’Huez en los que se decidirá el título.

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FUENTE: ciclismointernacional.com